Estas medidas pueden salvar al turismo mexicano del colapso

Un 93% de las empresas turísticas –unas 450,000 unidades– son microempresas con menos de 10 empleados que no podrán enfrentar la crisis. Aquí te presentamos medidas publicadas por una institución especializada.

El impacto al sector turístico nacional por la crisis del COVID-19 será brutal, de hecho, ya inició y se requieren de medidas inéditas que protejan en la medida de lo posible a la industria y promuevan la recuperación lo más pronto posible.

Un análisis elaborado por el Centro de Investigación y Competitividad Turística (CICOTUR) de la Universidad Anáhuac elabora algunas recomendaciones sobre lo que debe realizarse para evitar el colapso de este sector vital para la economía mexicana y que, con ello, los problemas que enfrentaremos en los próximos meses impacten menos.

Lo anterior, sustentado en las cifras que se conocen ya desde ahora sobre los efectos que tendrá la crisis en los siguientes meses sobre la industria turística a nivel global, de la que México no podrá escapar.

Ya veníamos mal, pero nos podría ir mucho peor

La crisis en la industria turística nacional se ha desatado a propósito de los efectos que en la economía del mundo generó el COVID-19. Pero el turismo mexicano ya tenía una trayectoria negativa desde antes de que iniciara la pandemia y sus efectos, según el análisis elaborado por el CICOTUR.

Luego de un largo periodo de bonanza, especialmente de cara al turismo internacional, el turismo mexicano inició en agosto de 2017 una tendencia de desaceleración que se mantuvo en 2018 y se agudizó en 2019, señala el documento.

En este contexto, luego de que entre 2012 y 2017 las llegadas de turistas internacionales no fronterizos crecieron a una tasa media anual de 2 dígitos (10.5%), en 2018 lo hicieron al 3.7% y en 2019 solo al 1.4%. 

En consecuencia, no es una sorpresa que el PIB turístico tenga un comportamiento decreciente y en el corto plazo recesivo, con independencia de la pandemia.

Una característica distintiva de la actividad turística es su estacionalidad. Para el mercado internacional, al paso del tiempo, México se ha posicionado como un muy importante destino turístico invernal, en el caso del mercado interno los tres periodos de mayor afluencia son: Semana Santa y Pascua; Verano; y Fin de año.

Adicionalmente, el 93% de las empresas turísticas –unas 450,000 unidades– son microempresas con menos de 10 empleados que ante la cancelación de ingresos, difícilmente tendrán el margen para enfrentar sus compromisos fiscales, crediticios y laborales.

En el caso de las grandes empresas y toda vez que el turismo es intensivo en mano de obra, las dificultades serán, también, considerables, pues ante la drástica caída en los ingresos, la falta de inventarios y los compromisos financieros y con otros acreedores es previsible el recorte de personal, sin descartar procesos de suspensión de pagos y, eventualmente, quiebras, dice el análisis.

Estas son las sugerencias

En este contexto, algunas de las recomendaciones sugeridas son las siguientes:

• Plan emergente con 4 componentes, toda vez que los más de 4 millones de empleados en la industria, así como las cerca de 450,000 microempresas turísticas (características y conexas) requerirán de un plan de ayuda como nunca se ha visto en la historia.
• El plan deberá incluir apoyos en al menos cuatro aspectos: laborales, fiscales, financieros y de promoción.
• En el ámbito laboral se debe encontrar un balance correcto en el que las empresas defiendan todo lo que puedan las posiciones de trabajo permanentes, pero con las ayudas que oxigenen la presión de pagar nóminas sin recibir ingresos: días solidarios, adelantos de vacaciones, jubilaciones anticipadas y reducciones salariales, son algunas de las medidas sugeridas.
• En materia fiscal es necesario implementar facilidades para el pago de impuestos que incluyan plazos sin intereses, cancelación de multas y recargos, sin descartar la importancia de acelerar las devoluciones de saldos a favor cuando esto proceda. De igual manera, el análisis del CICOTUR no aconseja ni pide la condonación de impuestos. Además, es deseable contar con un paquete de estímulos a la inversión.
• Si bien no son propiamente obligaciones fiscales, los apoyos para la atención de compromisos como el pago del Infonavit y del IMSS, podrían ser mitigantes que ayudarían mucho a las empresas de este sector y de la economía en general.
• Cuando llegue el momento, el CICOTUR señala que será necesario desplegar un esfuerzo extraordinario de promoción, pues los destinos turísticos competidores seguramente lo harán. Por ello se deben redirigir los recursos captados por el Derecho de No Residente –muy reducidos en este año– para financiar, nuevamente, la promoción turística del país.

También, el análisis sugiere, dada la magnitud de la afectación, la preparación de un conjunto de medidas de carácter legislativo formulado con gran apertura y en consulta con los integrantes de la industria.